martes, 24 de noviembre de 2009

Domingo entre semana

Domingo entre semana, lo de siempre.
Solo que hoy no quiero escuchar más nada.

No quiero que suenen esas hermosas canciones
No quiero que el mundo se detenga por nada
No quiero que nadie me mire a los ojos

No quiero ni necesito más palabras.

Quiero que este día pase desapercibido, quiero mirar para un costado y que no haya nada, quiero que las esquinas no me lleven a ningún lado, que tu casa se pinte de otro color, que mis manos se quiebren y dedicarme a otra cosa. Solo por hoy te prometo ser la sombra de lo que siempre pretendiste de mi, y darte el gusto de que pienses, de que yo también me fui con la lluvia perlada del febrero mas triste del mundo. Hoy te regalo tu mundo perfecto, donde yo no estoy en ningún lado.
Solo por estas horas te doy entrada libre a todo lo que me rodea, para que hagas lo que quieras y lo transformes a tu gusto, solo por hoy me mudo a donde nadie me encuentre, y responderé generalidades ante cualquier pregunta existencial.

Y vos reíte de todo, los días como hoy me alejo y me voy al lugar donde creí en el para siempre.

Pero mañana prometo retomar el amor nuevo, y ser la misma loca hablándole de amor a los perros. Mañana querido te juro que ya no vas a estar ni siquiera entre mis miedos.
Mañana el Sol se volverá a posar en mi boca, y la esperanza volverá a los pies de mi cama

Mañana nos reiremos de todo
Y yo volveré a amar con locura
A llorar por cualquier cosa
A reír solo por reír nomás

Que hoy suceda un milagro para los dos, que pase algo que te pueda sorprender, que vuelva el fuego a tu mirada llana, que se caliente tu pobre y anestesiado corazón, que un buen chiste te haga sonreír, que una hermosa canción te haga acordar quien sos, que una fuerte brisa te aleje para siempre de mi para que la onda expansiva de todo tu temor no destruya lo hermoso de los dos que quedó para siempre en mi interior.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Miedo andate por favor

llevate tus cosas un tiempo, andate a vivir a otra parte
salí de adentro mio unos días

dejame en paz, dame unos segundos de calma
que me duele este tiempo que estuve anestesiada
estos años de no saber quien soy

que me arde la garganta si te pido que te calles
que me dejes salir la voz, clara, precisa, aunque a veces absurda

Miedo, volvete loco como yo, dejanos tranquilas a mi y a mi sombra, volvete un aliado cuando hagamos el duelo inevitable, volvé a mi pasado y quedate con esa mujer en llamas, que se desarmaba con una mirada.

Miedo, quiero vivir esto como si fuera algo nuevo, no me contamines, no me dejes rendida a los pies de mi conciencia, quedate si querés a un costado, por si se me ocurre entregar lo único que queda de mi, cuidame cuando se me vaya el aliento rezándole a la última estrella antes del amanecer

en la cama de alguien que no prometa estupideces
y solo se siente a escuchar mi canción.